06/09/2017 Entrevista a Lourdes Rodriguez Arias Una vez más tenemos el ejemplo de una persona a la que la vocación la hizo cambiar el rumbo profesional a pesar de tener una carrera terminada y que aunque sin tener consolidada una estabilidad profesional en vez de seguir intentando conseguir trabajo en lo que se había preparado, decide comenzar peluquería en el I.E.S Ramón y Cajal y eso a pesar de haber dejado la adolescencia muchos años atrás. Me gustaría destacar las ganas y la ilusión que tiene.
Estuvo entre las paredes de mi salón como becaria y se terminó graduando en peluquería con mención de honor.
1.- ¿Cómo y porqué fue que decidiste estar o dedicarte a esta profesión?.
A mí siempre me había gustado y me había sentido atraída por la peluquería pero… en mi época cuando era más joven (risas) cuando acababas el instituto si eras buena estudiante y tenias buenas notas pues… lo de ir a FP era tanto como decir ¿vas a desaprovechar el poder ir a la universidad?, y me fui a la universidad, hice ingeniería técnica agrícola, lo terminé y después de repente me quedé en el paro. Vi todos los cursos que había en el INEM y entre otros vi “peluquería y estética” y decidí apuntarme. Hice el curso de auxiliar de peluquería y tuve una experiencia muy buena, estuve en un salón y muy contenta. Después me quedé con ellas trabajando y pensé ¿Por qué no continuar con ello?. Hablé con gente y valoré si seguir en instituto o academias y parece que la opción del instituto me atrajo bastante. Es cierto que en las academias me parecía que había más prácticas, pero me pareció muy importante tener una base teórica para poder ser una peluquera de calidad. Y así fue como terminé en el Ramón y Cajal.
2.- ¿Cómo se ve todo esto cuando como en tu caso tenias ya una carrera, una experiencia y cierta edad, y te planteas empezar de nuevo una cuestión como esta, en la que hay que tomárselo en serio para no perder mucho tiempo?.
Yo directamente he ido a por ello porque como a mí ya me faltan muchos años de experiencia no podía tontear y perder el tiempo y lo he apurado de otra manera. Sabes lo que tienes que hacer y si encima te gusta pues mejor todavía. En los chavales jóvenes es normal y no siempre los apetece libros, el peinarse entre ellos sí, pero ya eso de estudiar les cuesta más.
3.- Cuando ya has entrado en este mundillo, ¿cuál es lo que más te ha sorprendido y no esperabas que fuese así?.
Pues... que sales con todo aprendido como muy de libro y menos mal que tenemos muchos profesores de prácticas que siempre nos dicen... esto lo vamos a hacer así porque es como os lo vais a encontrar ahí fuera. Cuando estas fuera ves que todo no es tan rígido, y… bueno, hay cosas que a lo mejor no hay que hacerlas igual que como te vienen en los libros, si no de forma más relajada y quizás de forma más razonable de lo que pone en el libro. Hay cosas que al principio nos extrañan de como se hacen pues dices, ¿cómo hacen esto así?, en el libro lo pone de otra forma, pero eso es la falta de experiencia y con el paso del tiempo ves que era para optimizar el tiempo o incluso sabiendo que no es lo correcto si a ellos les es más rentable… y los clientes tampoco saben realmente como son los procesos.
4.- ¿Cuál es lo que más te gusta?.
Me gusta muchísimo la peluquería de caballero, me parece que es lo más difícil, el corte más puro y creo que si dominas lo de caballeros lo de señora lo tienes chupado. A mí, al menos eso es lo que me parece, porque está muy bien que las señoras salgan muy guapas pero los señores también que salgan bien. No sé si es porque yo lo he vivido en mi casa, pero mi madre iba a su peluquería y mi padre a la de él. Yo lo que veía en esas peluquerías mixtas o unisex era que al que no se cuidaba era al hombre y le despachaban en cinco minutos y eso se sigue haciendo. Gracias a esta moda que tenemos ahora del corte de pelo mas estructurado con sus tupes y sus degradados, ha hecho ver a los hombres que tienen que ir a cortarse el pelo a ciertos sitios con cierto grado de especialización aunque eso no quita que haya mujeres que lo hagan perfectamente. Yo estaría encantada de ser una de ellas, pero se tiene que empezar a valorar más esto y en general toda la peluquería. Creo que ha estado un poco devaluada y todavía lo está.
5.- ¿Entonces defiendes la especialización?.
Yo sí, como pasa en otros oficios. Aunque hay que ser un poco flexibles, porque yo sé que hay sitios donde una persona solo hace color, o solo peinan y entiendo que puede llegar a ser monótono y que la puedes estar limitando su imaginación y creatividad, porque es muy buena en color pero quizás es también muy buena haciendo recogidos. Pero aunque no se cierre uno a poder combinar cosas creo que es fundamental el trabajo en equipo, muy, muy importante porque todos no pueden dominar todo y lo que no se te ocurre a ti lo hace otra persona. En esta vida todo habría que hacerlo en equipo, por eso yo veo que el futuro es la especialización.
6.- ¿Cuál es tu sueño dentro de la peluquería, qué te gustaría conseguir?.
Pues mira yo voy poco a poco y paso a paso sin pensar en lo de más arriba, ahora mismo no se… lo que quiero es aprender y hacerlo todo bien e ir viendo que cada día lo voy haciendo mejor y después ya se verá… en principio no quiero pensarlo, pero me atrae mucho el color y el caballero. A mí me gustaría llegar a hacer los cortes de caballero como los haces tú, ¡perfectos!.
7.- Gracias Lourdes, pues cuéntame entonces como ha sido tu experiencia en las prácticas y si han sido como te esperabas.
La experiencia ha sido muy positiva, tu me enseñas muchísimo, usas muchas técnicas, de hecho he conocido técnicas nuevas que no nos las habían enseñado, el trato con la gente que veo que es muy positivo y me ha faltado haber podido traer modelos, pues a la gente le cuesta que confíen en ti. Para mí ha sido todo positivo.
8.- ¿Te ves haciendo más hombres que mujeres?.
Pues todavía no lo sé. A mí me gusta más caballeros pero creo que todavía es pronto para saber por dónde va a ir mi futuro. Todavía me falta terminar prácticas en señora, pero disfruto mucho con las dos aunque prefiero caballeros. El ritmo es más tranquilo y como más cercano. Los degradados me gustan mucho, es cierto que los cortes son más llamativos y que se usan muchas herramientas, pero me ha sorprendido mucho los cortes clásicos y verte como utilizando ciertas técnicas puedes dejar una cabeza así de bien, viniendo como vienen y con esas formas de cráneos con esos cogotes abultados etc. y con esas cabezas con poco pelo y que salen que parecen otra, quedan perfectas, ¡me ha parecido asombroso!. Yo no me esperaba esos resultados y veo que no solo es quitar pelo.
9.- ¿Eres partidaria de la diferenciación y separar a los hombres de las mujeres en el salón?.
¡Sí! A mí nunca ni siquiera antes de dedicarme a esto, nunca me gustó el tema de estar juntos. Pero por unos y por los otros. A las mujeres no nos gustar estar… (risas) con el tema del tinte, rulos o papel de plata y que nos estén viendo, aunque no te pueda importar, preferimos que no nos vean. Al señor creo que tampoco le apetece estar junto a las mujeres, tenemos conversaciones diferentes y prefieren estar más en su espacio. Yo claramente lo diferenciaría, pero no unos enfrente de los otros, si no en salas o espacios distintos y completamente separados. Esa al menos es mi opinión.
10.- Evidentemente eres muy novel en esto pero, … ¿qué consejo darías a los que se inician en esto?.
Puf… pues que observen mucho, que se fijen mucho, que pregunten mucho y que estudien, es muy importante y es cierto que cuando empiezas dices “que rollo” y ¡no!. Es muy importante la teoría, pues luego lo aplicas todo. Por eso a mí me parece fundamental, que continúen con la formación y no lo dejen nunca y si es con profesionales como tu pues mejor todavía.
11.- ¿Quieres añadir algo a esta entrevista?.
Darte las gracias por la entrevista y… que estoy muy contenta de estar aquí contigo Mario y que te voy a echar de menos, veo que solo me queda de estar un día y pienso “que pena”.
Muchas gracias Lourdes a ti por esa ilusión y por esas ganas que tienes de desarrollar esta profesión.
Agosto 2017